De corpiños, burras, invitaciones y locuras

Loco diseño ponja
Oriente, tantos años de historia, una cultura milenaria, para qué, para que venga un diseñador de lencería japonés a crear un corpiño que permite cultivar arroz.
Es difícil de creer, pero es cierto.
Y si en el corpiño se puede cultivar arroz, no me quiero ni imaginar lo que se podrá cultivar en el slip o en el bóxer.
Según Yoshiko Masuda se inspiró en ese diseño porque en el último año las jóvenes japonesas han tomado un tremendo interés en la agricultura.
La verdad es que no sé si impulsará a las mujeres a la agricultura, pero más de un japonés va a querer perderse en esos arrozales.

Una vieja burra
Según información de parte de la prensa más seria, una burra que se toma una cerveza todos los días podría ser la más vieja del mundo.
La verdad es que yo conozco un par de viejas burras, pero no estoy seguro si llegaron a esa edad bebiendo cerveza.
Rosie, la burrita bebedora, se toma medio litro de cerveza negra por día y según su propietaria es la más longeva y saludable del mundo, claro que no hay forma de comprobar su edad.
Bueno, con la conductora Mirtha Legrand pasa lo mismo.
No lo digo porque sea una burra vieja, sino porque tampoco hay forma de comprobar su edad.

Cristina, Cobos y la silla
Aunque todavía no se hizo la invitación al vicepresidente, el Bicentenario podría lograr lo inimaginable: que la presidenta Cristina Fernández y Julio Cobos se sienten a una mesa juntos.
Si yo fuera Cristina desconfiaría si Cobos se me pone atrás para acercar la silla cuando esté por sentarme, no sea cosa que se tiente y la termine sacando.

Contra natura
Aún no me decido qué me sorprende más: si las declaraciones de Flor De la V, quien aseguró que va a ser madre o que Diego Maradona haya convocado para el mundial al Chino Garcé.
Creo que no hay dudas de que se trata de acto que va contra la naturaleza… lo del Chino Garcé, digo.